Hola familias,
Hoy hemos tenido una celebración muy especial, ya que celebrábamos el bautizo de Eider.
La Eucaristía ha comenzado con la comunidad dentro de la iglesia, excepto Eider, su padre, su madre, sus hermanos y su padrino y madrina. Estaban fuera, en la puerta y allí ha salido Javi ha recibirles y ha preguntar a que venían. Han respondido que a bautizar a Eider y han entrado en la iglesia mientras cantábamos: "Hola Dios, estoy aquí".
Después de esto y de saludar a Jesús, hemos hecho las renuncias - a la violencia, al maltrato, a la insolidaridad, al egoísmo, etc...-
Nieves y Martín mediante una pequeña representación (que si, que nos hemos dado cuenta de que estaba preparado), nos han hecho reflexionar sobre si merece la pena hacer algo o no ante toda la maldad, violencia, etc... que hay en el mundo. La conclusión: a pesar de la cantidad de barbaridades que aparecen día a día en los periódicos, aún merece apostar por la ayuda, por la justicia, por la solidaridad (aunque esto no aparezca en la prensa).
Nieves nos ha contado entonces la historia de la vecina cotilla que llevaba meses poniendo a caldo a la familia que vivía enfrente de ella: " que sucios son, los niño van con lamparones en las camisetas, no lavan la ropa, la cuelgan sucia, llena de horribles manchas negras" -por cierto, no os imaginais lo bien que ha representado Nieves a esta señora, je,je,je-." Un día, invitó a una amiga a casa y mientras seguía poniendo verde a la vecina dijo: " bueno, mejor lo ves tu misma, no tienes más que mirar a través de mi ventana y verás tú misma como lo tienen todo de sucio".
Cuando la amiga miró a través de los cristales, se volvió a su amiga y le dijo: "perdona, guapa, pero me parece que la familia que vive enfrente no son unos sucios. Son tus cristales los que están llenos de mierda."
Con esto volvíamos a darnos cuenta de que tenemos que intentar ver las cosas, a las personas con las gafas de Dios y no a través de nuestros cristales sucios.
Hemos cantado como alabanza: "Como podré agradecer tanta bendición".El domingo pasado fue Diego el que ayudó a Nieves con los gestos del canto. Hoy ha sido Ander.
Tras el Evangelio se ha cantado: "Tú palabra, Señor" y Javi ha comenzado la homilía preguntandonos sobre el Evangelio. Era difícil y complejo. Nos ha costado tanto a las personas más mayores como a las más pequeñas. La mayoría solo nos habíamos quedado con la frase "cielo y tierra pasarán más tus palabras no pasarán" y sin embargo Javi quería hoy hacer hincapié en la higuera, en como tenemos que fijarnos en las yemas aún antes de que salgan las hojas o los frutos.
Por ahí han ido las palabras para todas las personas que acompañábamos hoy a Eider -especialmente para su ama y aita y hermanos (también recordando a los aitites y amamas)-. Al final, nos hemos comprometido a apoyar para que Eider pase de yema a buen fruto.
Así se ha llegado al momento del agua. Eider se ha portado como una santa (Javi ya le ha encontrado hueco a la placa que van a poner en un futuro "aquí se bautizo a Santa Eider), y unicamente hemos notado que las palabras del Señor cura le aburrian un poco - por aquello de los bostezos-.
Hoy, como también celebrabamos el día de la Iglesia Diocesana, las aportaciones que se han recaudado con la colecta, van dedicadas a las necesidades -abundantes por otro lado- de nuestra iglesia.
Durante la comunión se ha cantado una adaptación -escrita por Txema- de la canción Dust in the wind-
Para acabar con el rito del bautismo, Javi les ha entregado a Gorka e Itziar (con Eneko e Iker apoyando) una vela encendida de la luz del Cirio Pascual, como signo de la trasmisión de la fe. Mientras recogían la vela, Eider sonreía.
Al final se ha cantado la canción: Adelante.
Y para acabar la celebración, Itziar ha contado como comenzaron a venir a las celebraciones y por que continúan haciéndolo, agradeciendo también a la comunidad por su trabajo.
ZORIONAK Eider¡¡¡¡¡¡ Ahora te esperamos también a ti todos los domingos.
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